Un mundo feliz (Brave New World) es la novela más
famosa del escritor británico Aldous
Huxley, publicada por primera vez en 1932.
Un Mundo Felíz. Portada |
Recrea una democracia que
no lo es, una dictadura que no lo parece, una cárcel de la que los
prisioneros no quieren escapar porque no saben que lo son, condicionados desde
su extraña concepción para ser lo que tienen que ser. El título tiene origen en
una obra del autor William Shakespeare, La tempestad, en el acto V,
cuando Miranda pronuncia su discurso:
¡Oh qué maravilla!
¡Cuántas criaturas bellas hay aquí!
¡Cuán bella es la humanidad! Oh mundo feliz,
en el que vive gente así.
¡Cuántas criaturas bellas hay aquí!
¡Cuán bella es la humanidad! Oh mundo feliz,
en el que vive gente así.
Esta obra se encuadra dentro de las llamadas anti
utopías o distopías, que muestran mundos y civilizaciones futuras dominadas por regímenes
totalitarios que ejercen un control total sobre sus ciudadanos. En "Un
mundo feliz", la rebelión no es imposible, pero, simplemente, no es
deseable. Sus habitantes no conocen otra manera de ser felices que hacer,
precisamente, lo que han nacido para hacer. Tienen todas las comodidades que
pueden desear y, si esto no fuera suficiente, tienen las drogas de diseño para
alterar su percepción y olvidar y modificar sus “inoportunas emociones”
pues prácticamente cualquier emoción que sugiriera una mentalidad independiente
se considera en esta sociedad como negativa. Es la sociedad capitalista que nos
ha tocado vivir. Huxley muestra cómo aquello que deseamos puede
hacerse realidad.
La novela es una crítica a lo que se vivía en la América
de los años 30, un reflejo de los miedos del período de entreguerras. Una
sátira del comunismo, del socialismo, del capitalismo (él se
consideraba anarquista), de la tecnologización de los procesos de
producción.
Aldous Huxley |
La novela anticipa el desarrollo en tecnología reproductiva,
cultivos humanos e hipnopedia, que, combinadas, cambian radicalmente la
sociedad. El mundo aquí descrito es irónico y ambiguo: la humanidad es
desenfadada, saludable y avanzada tecnológicamente. La guerra y la pobreza han
sido erradicadas, y todos son permanentemente felices. Sin embargo, la ironía
es que todas estas cosas se han alcanzado tras eliminar muchas otras: la
familia, la diversidad cultural, el arte, el avance de la ciencia, la
literatura, la religión y la filosofía.
Entre los personajes que parten de esta novela están:
Lenina; la perfecta ciudadana, feliz, conforme con su
comportamiento, cumpliendo su función en la sociedad, que se relaciona con
cuantos hombres le sea posible, pero bastante incapaz de ejercer su libertad de
pensamiento.
Bernard Marx; intelectualmente más listo que los demás “especímenes”
de su casta, su inteligencia hace que no responda al condicionamiento; pero
físicamente es más pequeño que el promedio, se enfrenta (o al menos cree
enfrentarse) a problemas sociales incluyendo el rechazo social por parte de las
mujeres de su casta y falta de respeto por parte de las castas inferiores. Como
resultado, se ha convertido en un inadaptado social, prefiere ser miserable que
tomar soma y a menudo expresa opiniones de inconformismo.
John el Salvaje; hijo de dos ciudadanos del mundo
civilizado (es el resultado de un error accidental en el método
anticonceptivo). Su madre se perdió en la reserva salvaje años atras,
quedándose allí sola, dio a luz a John. Él creció con el estilo de vida de la
tribu de los zuñi, y su religión, que es una mezcla entre creencias zuñi y
cristianas. Sin embargo, también recibe la influencia de la educación que le da
su madre (quien le enseñó a leer) y del descubrimiento de las obras de William
Shakespeare.
El choque cultural que resulta cuando John es
llevado a la sociedad del “Mundo Feliz”, provee un conducto para que Huxley
compare los valores de la sociedad con los nuestros y señala los mayores
defectos de la sociedad del Mundo Feliz.
Fragmento de Un Mundo Felíz |
El punto clave de carácter moral del libro gira
alrededor de dos problemas diametralmente opuestos. El primero, y el más obvio,
es que para asegurar una felicidad continua y universal, la sociedad debe ser
manipulada, la libertad de elección y expresión se debe reducir, y se ha de
inhibir el ejercicio intelectual y la expresión emocional. Los ciudadanos son
felices, pero John el Salvaje considera que esta felicidad es artificial y sin alma.
alegando el hecho de que el dolor y la angustia son parte tan
necesaria de la vida como la alegría, y que sin ellos, poniéndolo en
perspectiva, la alegría pierde significado alguno.
El segundo problema presentado en la novela es que la
libertad de elección, la inhibición de la expresión emocional y la búsqueda de
ideas intelectuales resultan en la ausencia de la felicidad.
SOMA: El remedio a los males del Mundo Felíz |
Fuentes:
www.wikipedia.com
www.rincondelvago.com